Comunicado en el marco del 25N Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer

La violencia feminicida debe ser considerada un problema de salud pública y una violación múltiple y sistemática de los derechos humanos de mujeres, niñas, niños y adolescentes.

México ha ocupado durante años los primeros lugares en América Latina en denuncias por agresiones, violencia sexual, trata de personas, desapariciones y feminicidios. Ante este panorama, resulta alarmante que los niveles de impunidad y el subregistro de víctimas se haga cada día más grande.

Violencia que no para

De acuerdo al informe semestral de la Comisión Nacional de Búsqueda con corte a junio de 2021, las mujeres representan el 24.7% de las personas desaparecidas, pero si nos enfocamos en el rubro de las niñas y adolescentes menores de 18 años, éstas representan más del 55% de los casos.

En cuanto a las muertes violentas de mujeres, de enero de 2018 a diciembre de 2020 el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) ha documentado 11,217 casos de mujeres y niñas asesinadas en el país.

Ante este panorama resulta preocupante observar que los casos de mujeres menores de 18 años víctimas de feminicidio pasaron de 50 casos en 2015 a 104 en 2020, es decir, se duplicaron, teniendo al Estado de México como la entidad federativa con el mayor número de casos reportados.

Por otro lado, el delito de violación ha aumentado un 31% en los últimos 5 años; el de abuso sexual un 86%; el acoso en un 400%; y el de hostigamiento en un 123%. En el caso particular de la Ciudad de México, según los datos más recientes otorgados por la titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, el delito de violación aumentó 28.2% tan solo en el transcurso de enero a octubre del 2021. 

Lo anterior confirma que la violencia contra las mujeres en México se despliega de manera despiadada en todas sus formas. Se trata de violencias y muertes que podrían ser evitadas con una oportuna y diligente intervención social y estatal y que, al no hacerlo, no solamente se propicia el contínuo de violencia contra las mujeres, sino que se configura una responsabilidad del Estado derivada de sus omisiones de respeto, protección, promoción y garantía de los derechos de mujeres, niñas y adolescentes.

En el marco del 25 de noviembre “Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres” desde el Instituto Mexicano de Derechos Humanos y Democracia reiteramos nuestra exigencia al Estado mexicano para que considere la violencia contra las mujeres como un tema prioritario en su agenda. Es urgente que se implementen acciones concretas que prevengan y eliminen la violencia feminicida en niñas, adolescentes y mujeres.  

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