Por: Edgar Cortez
El 1 de octubre arrancará el gobierno encabezado por la primera mujer presidenta de México, Claudia Sheimbaum, y ahí empezará a concretarse lo que ella ha llamado “el segundo piso de la transformación”.
No se pretende presentar un rosario de desgracias sino sólo apuntar problemáticas presentes en el país y las cuales requieren de acciones de gobierno que no sea simulación.
En materia de derechos humanos, ¿cuáles son los desafíos que deben considerarse para ese segundo piso?
El 10 de junio de 2011 se publicó en el Diario Oficial de la Federación (DOF) la reforma constitucional en materia de derechos humanos, en ese periodo se habló del inicio de un nuevo paradigma jurídico y de transformaciones institucionales para adecuarse. Esta aspiración tenía como base el texto del artículo primero constitucional.
En los Estados Unidos Mexicanos todas las personas gozarán de los derechos humanos reconocidos en esta Constitución y en los tratados internacionales de los que el Estado Mexicano sea parte, así como de las garantías para su protección.
Las normas relativas a los derechos humanos se interpretarán de conformidad con esta Constitución y con los tratados internacionales de la materia favoreciendo en todo tiempo a las personas la protección más amplia.
Todas las autoridades, en el ámbito de sus competencias, tienen la obligación de promover, respetar, proteger y garantizar los derechos humanos de conformidad con los principios de universalidad, interdependencia, indivisibilidad y progresividad. En consecuencia, el Estado deberá prevenir, investigar, sancionar y reparar las violaciones a los derechos humanos, en los términos que establezca la ley.
Desde la expectativa de pleno cumplimiento de este artículo constitucional revisemos algunos pendientes actuales que deben ser considerados por la siguiente administración federal.
Primer debate presidencial y derechos humanos
Lo primero será incluir expresamente los derechos humanos en las prioridades y en lo que será el plan de gobierno a seguir. Los derechos humanos estuvieron ausentes durante la campaña y hasta la fecha no se les explícita, por tanto es necesario que la próxima presidenta puntualice qué compromisos pretende adquirir para garantizar los derechos humanos de todas las personas y comunidades.
Es necesario contar con una estrategia para atender la desaparición de personas que actualmente, según el Registro Nacional de Personas Desaparecidas, llega a más de 115 mil personas. ¿Cuál será el Programa Nacional de Búsqueda para poder localizar con vida al mayor número posible? ¿Cómo se va a considerar la búsqueda en la totalidad de las fosas clandestinas que existen en el país?
Se contabilizan más de 52 mil restos humanos, además de miles de fragmentos sin identificar que provienen de fosas clandestinas. ¿Cuál será la ruta para generar capacidad y un avance continuo en la identificación? sobre todo luego del fracaso del Mecanismo de Identificación Forense (MEIF) y de la inexistencia del Centro Nacional de Identificación Humana (CNIH).
El Mecanismo Extraordinario de Identificación Forense: un proyecto trunco
¿Se propondrá algún programa con las Fiscalía General de la República (FGR) y las fiscalías locales que proponga investigar casos no de manera aislada sino agrupándolos para judicializarlos como macro casos?
Otro aspecto clave será todo lo que se refiere a la violencia contra mujeres. Del total de personas desaparecidas el 20 por ciento son mujeres y buena parte tienen entre 15 y 19 años. ¿Cuáles son las causas?
Por otro lado los homicidios de mujeres rondan un promedio de 10 diariamente y los feminicidios son un delito que sigue creciendo. Las 25 Alertas de violencia de género contra mujeres que se han declarado en 22 estados han mostrado una pobre eficacia. La posibilidad de que las mujeres puedan gozar de una vida libre de violencia está lejos de ser una realidad, entonces qué nuevas acciones se propone la próxima presidenta de la República.
Otro pendiente enorme tiene que ver con los periodistas y su seguridad. De acuerdo con la organización Artículo 19, a la fecha se han registrado 166 asesinatos de periodistas entre el año dos mil y ahora, de los cuales 46 corresponden a este sexenio.
Cuáles serán las nuevas acciones para revertir la impunidad y sobre todo detener la violencia en contra de periodistas. De igual manera se requiere la actualización del trabajo del Mecanismo de protección pues el número de personas en riesgo que busca protección no deja de crecer y lamentablemente varios periodistas bajo protección han sido asesinados, lo que da cuenta de la fragilidad de la protección ofrecida.
Todas estas realidades sufren de una muy pobre procuración de justicia, la investigación que se realiza es poca y deficiente, lo que significa que buena parte de la impunidad existente se gesta en las fiscalías.
Otro grupo que vive una situación de enorme riesgo son las personas defensoras del medio ambiente, pues de acuerdo con un informe del Centro Mexicano de Derecho Ambiental en 2023 se dieron 283 agresiones en contra de estas personas y 20 fueron asesinadas.
No se pretende presentar un rosario de desgracias sino sólo apuntar problemáticas presentes en el país y las cuales requieren de acciones de gobierno que no sea simulación.
¿Qué tienen en común estas realidades? Que todas sufren de una muy pobre procuración de justicia, la investigación que se realiza es poca y deficiente, lo que significa que buena parte de la impunidad existente se gesta en las fiscalías. Instituciones que no son el foco de la actual reforma de justicia.
La segunda cosa común es la carencia de políticas de prevención, no existen acciones que apunten prevenir las causas, pues muchas de estas no se conocen por falta de investigación y análisis de las problemáticas.
La tercera es que no se escucha a las víctimas. En todas las realidades que he mencionado existen miles de víctimas pero su palabra, su frustración y exigencia no tienen cabida.
Si el segundo piso quiere realmente garantizar los derechos humanos de todas las personas requiere de priorizar algunos de estos problemas y proponerse dar resultados tangibles.