Algunos vienen diciendo que son casos aislados, que exageramos, que no es tan grave, que hacemos falsas denuncias. Pero los números e historias hablan: la violencia feminicida es una realidad que sigue violentándonos y arrebatándonos vidas.

En un país donde ser mujer implica vivir con miedo, seguimos denunciando, seguimos exigiendo justicia. Hablemos con historias y datos lo que algunos intentan minimizar: que la violencia contra nosotras no es una excepción, es la norma en un sistema que no nos protege.
Violencia familiar
¡A puerta cerrada nada! La violencia familiar no es asunto privado
¿Qué dicen los datos?
Conoce la lucha
de Diana

El caso de Diana habla de la violencia de género y los obstáculos en el acceso a la justicia en México.
En abril de 2017 es víctima de violencia por su entonces pareja Eduardo N, la cuál fue incrementando hasta que la agrediera físicamente. Derivado de toda esta situación en 2019 Diana fue víctima de violencia feminicida.
Desde el momento que Diana denunció, Eduardo N, incumplió al menos 7 veces con las órdenes de protección que se habían impuesto. Cada vez que había un incumplimiento por parte de Eduardo N, Diana acudía al Ministerio Público a señalar estas situaciones, sin embargo ni una sola vez se consideró necesario realizar ningún acto por parte de las autoridades competentes.
Este caso refleja la urgencia de un sistema de justicia que brinde respuestas oportunas y efectivas a quienes sufren violencia familiar, pues esta sigue sin considerarse como un “delito grave”, lo que ocasiona impunidad y la ausencia de una política adecuada de prevención y atención a este delito.
Violencia sexual
El vuelo de una golondrina no hace verano. Pero nuestra unidad acaba con la impunidad
¿Qué dicen los datos?
Mujeres que denunciaron por violencia sexual a Andrés N

En 2020, se hicieron públicos 61 testimonios que señalaban a Andrés N por violencia sexual, lo que llevó a la apertura de varias Carpetas de Investigación en la FGJCDMX. Como resultado, el Poder Judicial de la CDMX emitió órdenes de aprehensión por el delito de violación.
Tras su localización en Israel, el gobierno mexicano solicitó su extradición para que enfrente la justicia en México. Las denunciantes y el IMDHD exigimos un juicio justo, con debido proceso y perspectiva de género, que garantice verdad, justicia y reparación para las víctimas.
Tentativa de feminicidio
Que no me haya matado no le quita lo feminicida
¿Qué dicen los datos?
Ángela: intento de feminicidio y violencia institucional

La tentativa de feminicidio es un delito grave que refleja la violencia extrema a la que muchas mujeres son sometidas. Se trata de agresiones en las que la intención de matar está presente, pero la víctima sobrevive, a menudo con secuelas físicas y emocionales de por vida.
En marzo de 2022, Ángela sufrió un intento de feminicidio por su entonces pareja, el cual no logró gracias a la intervención de una tercera persona.
En un inicio, y a pesar de la gravedad de las lesiones, de las cuales Ángela todavía tiene secuelas, la Fiscalía determinó el delito como violencia familiar y lesiones. Después de 3 años, se ha logrado la vinculación del agresor por tentativa de feminicidio; no obstante la violencia institucional contra Ángela sigue vigente.
Hoy Ángela está en espera de que sean admitidas sus pruebas en juicio. Exigimos al TSJEdoMex que dicte una sentencia ejemplar y que envíe un mensaje de no permisividad.
Criminalización y mujeres en prisión preventiva
Los delitos de un hombre me tienen en prisión. No a la criminalización de las mujeres
¿Qué dicen los datos?
Xóchitl Ramírez Velasco

defensora de derechos humanos con más de 20 años de trabajo en Guerrero, fue detenida el 3 de mayo de 2023 en Cuernavaca, Morelos. Su detención, se basa en una acusación infundada por un secuestro en 2019, sin pruebas que sustenten su responsabilidad.
Este caso refleja el uso del sistema de justicia para criminalizar a quienes defienden los derechos humanos en México. Exigimos su liberación inmediata y el respeto a su derecho a un debido proceso, libre de irregularidades y arbitrariedades.
Desaparición forzada
La desaparición de mujeres también es violencia feminicida
¿Qué dicen los datos?
Claudia Uruchurtu Cruz

Activista de 47 años originaria de Nochixtlán, Oaxaca, desapareció el 26 de marzo de 2021 tras participar en una manifestación afuera del palacio municipal de Nochixtlán.
Durante cuatro años, denunció actos de corrupción y abusos de poder por parte del gobierno local. Testigos presenciaron cómo fue forzada a subir a una camioneta roja, sin que hasta la fecha se conozca su paradero.
Este caso es emblemático en Oaxaca, al ser el primero en el que autoridades municipales en funciones son vinculadas a proceso por desaparición forzada.
Feminicidio
No me mató porque lo provoqué, me mató porque soy mujer
¿Qué dicen los datos?
La lucha de una madre en busca de justicia

Fernanda Sánchez Velarde, una joven de 18 años originaria del Estado de México, madre de un niño de un año y con un embarazo de cuatro meses, fue víctima de feminicidio el 4 de enero de 2014 a manos de su pareja, Led «N».
Inicialmente, su muerte fue catalogada como suicidio; sin embargo, tras años de lucha y recolección de pruebas que demostraron un contexto de violencia previa, en 2022 se logró una sentencia condenatoria de 69 años y 3 meses para el agresor por los delitos de feminicidio y aborto.